Ciudad de San José y sus museos:
La ciudad de San José se ubica a 1.149 metros sobre el nivel del mar, goza de una temperatura promedio de 24ºC. Aunque es una ciudad relativamente pequeña, cuenta con una gran cantidad de atractivos culturales y educativos, entre los que se destacan: el Teatro Nacional, construido entre 1890-1897, y financiado por el pueblo costarricense mediante un impuesto a las importaciones. Asimismo destacan edificios históricos como el Teatro Melico Salazar, Museo Nacional, Edificio Metálico, Museo de los Niños, Museo de Arte y Diseño Costarricense, Museo de Arte Contemporáneo, Museos del Banco Central (en la Plaza de la Democracia) y el nuevo y renovado Museo de Jade. San José ofrece una gran cantidad de hospedajes para todos los presupuestos y una amplia oferta gastronómica.
Valle de Santa María de Dota y Copey:
En el Valle de Santa María de Dota convergen todas las vías de acceso a comunidades como Copey, San Marcos de Tarrazú y San Pablo de León Cortés por lo que se le ha denominado la zona de Los Santos. Por su altura, y calidad de sus suelos, el Valle de Santa María de Dota cuenta con la producción de uno de los mejores cafés del país. Por otro lado, el Valle de Copey, ubicado a 1853 metros de altitud, cuenta con una impresionante belleza natural que resulta muy apropiada para caminatas, fotografías, paseos a caballo, pesca recreativa, apreciar cataratas y observación de aves, entre muchos otros.
Valle de Orosi:
El Valle de Orosi ubicado en la Provincia de Cartago es un valle de exuberante belleza natural, surcado por ríos y aguas termales. Orosi cuenta con al menos dos balnearios públicos, además varios hoteles cuentan con piscinas de aguas termales. En el centro del pueblo de Orosi se encuentra la Iglesia y Museo Colonial, construidos en 1743 por misioneros franciscanos y que constituye una de las pocas construcciones coloniales en buen estado que todavía existe en Costa Rica, en 1985 fue declarada Monumento Nacional. El área es también una de las más lluviosas del país, y su riqueza hídrica está protegida por el Parque Nacional Tapantí.
Ruinas de Ujarrás y mirador:
Su nombre completo es realmente las Ruinas de la Iglesia de la Purísima Concepción del Rescate de Ujarrás, la cual fue construida en la segunda mitad del siglo XVI por Don Miguel Gómez de Lara, Gobernador de Costa Rica en ese momento. Al igual que la Iglesia de Orosi, fue declarada Monumento Nacional en 1920. Fue destruida por terremotos y por las continuas inundaciones del Río Orosi. Actualmente se puede visitar como un atractivo arquitectónico e histórico de gran interés en el circuito del Valle del Reventazón desde el mirador del Instituto Costarricense de Turismo.
Ciudad de Cartago y la Basílica de los Ángeles:
Hasta 1823 la ciudad de Cartago fue la capital de Costa Rica cuando fue conocida como “La muy Noble y muy Leal Ciudad de Cartago”. Hoy en día es la capital religiosa del país, ya que alberga a la Patrona de Costa Rica, Nuestra Señora la Virgen de los Ángeles. El templo actual, La Basílica, se construyó en 1921 y en su interior hay un pequeño Santuario al que acuden los devotos de la Patrona en busca de un milagro, sanación o en un acto de agradecimiento por favores concedidos. Todos los 2 de agosto se celebra una peregrinación que mueve a más de dos millones de personas desde todas partes del país para rendirle culto a la Virgen de los Ángeles. En el centro de Cartago también, se encuentran las Ruinas de Cartago, que es una iglesia que se trató de construir tres veces y las tres veces un terremoto la derrumbó.
Volcán Irazú:
El Volcán Irazú es uno de los 7 volcanes más activos del país y también el más alto con sus 3.432 metros sobre el nivel del mar. El complejo volcánico del Irazú incluye también el Volcán Turrialba, por lo que se suelen llamar volcanes gemelos. Está protegido por la figura de Parque Nacional y cuenta con cuatro cráteres y dos lagunas, las cuales pueden ser visitadas utilizando el sistema de caminos disponibles y los puntos de mirador. En la zona alrededor del volcán hay otros atractivos muy interesantes como por ejemplo los campos de flores ornamentales, los cultivos de fresas, el Museo de Volcanes, entre otros.
San Gerardo de Dota:
San Gerardo de Dota es un pueblo pequeño que pertenece a la zona de Los Santos. Al desviarse de la carretera principal del Cerro de La Muerte se llega a un pequeño paraíso natural ubicado en un valle y surcado por el Río Savegre. Es un lugar especial para el avistamiento de aves, en especial el quetzal, por lo que decenas de personas interesadas en ornitología visitan cada año el sector. Otro de los atractivos de la zona es el camino hacia las dos cataratas principales del Río Savegre.
Ciudad de Turrialba:
La ciudad de Turrialba se fundó como parte del desarrollo económico que produjo la construcción del ferrocarril al caribe. Cuenta con la declaratoria de ciudad de Interés Arqueológico Nacional, por su cercanía con asentamientos indígenas de importancia para el país, específicamente el Monumento Nacional Guayabo. Turrialba es sede de dos centros de enseñanza superior universitaria con gran influencia internacional: el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE) y las instalaciones de la Universidad de Costa Rica. Por otro lado, uno de los quesos más famosos del país se produce en el área así como otros quesos artesanales. Actualmente se ha convertido en la base de muchos operadores turísticos que promocionan el rafting en aguas blancas en el Río Pacuare y el Río Reventazón. El Río Pacuare en algún momento fue considerado por National Geographic como uno de los ríos más hermosos del mundo para el deporte de rafting en aguas blancas. De hecho, dicha actividad tiene un auge bastante importante entre las actividades turísticas de nuestro país.
Cerro de la Muerte o Cerro Buena Vista:
El Cerro Buena Vista, popularmente conocido como el Cerro de la Muerte pertenece a la Cordillera de Talamanca, tiene una altitud de 3451 metros y aunque permanece la mayoría del tiempo nublado, con buen clima es posible observar ambas costas: el Pacífico y el Caribe. Cuenta con un bosque de páramo único en el país, el cual ha sido protegido por el Parque Nacional Quetzales. En el área se pueden hacer avistamientos de quetzales en varias épocas del año, por lo que es un sitio apetecido por los pajareros.
Ciudad de Puriscal:
El pueblo de Puriscal se asienta en la parte oeste de San José, a unos 1.105 metros sobre el nivel del mar. Su importancia radica en ser tierra indígena, por lo que se puede visitar la Reserva Indígena de Quitirrisí, y conocer sobre la cultura de esta comunidad. Asimismo, se pueden visitar plantaciones de tabaco y comprender el proceso de elaboración de puros. Finalmente, entre los atractivos más nuevos de la zona se encuentra el Parque Nacional La Cangreja, que ofrece una riqueza natural sin igual.